La diputada del Grupo Nacionalista Canario, Nereida Calero, ha reclamado esta mañana a la consejera de Turismo, más implicación y más acciones para luchar contra la precariedad laboral y el abuso que se da en algunas empresas del sector.
Esta semana, la diputada Jana González traía al Parlamento la situación de las camareras de piso, “pero pasa lo mismo en otros ámbitos como en la restauración o en las empresas de excursiones”, explicó.
Al Grupo Nacionalista Canario “nos trasladan situaciones de contratos por días e incluso por horas, que siempre superan las establecidas y además no les permiten librar durante semanas. En el peor de los casos, este trabajo se realiza sin contrato y sin recibir una remuneración económica durante meses”.
En ocasiones, “tienen que pagar de su propio bolsillo el combustible de los vehículos para realizar la jornada y tardan en devolverles el importe”.
Es lamentable que esto ocurra, que estos empresarios se aprovechen de que el personal no tiene posibilidad de encontrar un trabajo mejor, ya sea por su formación o por sus circunstancias.
El trato del empresario a los trabajadores es un factor que “debería ser tenido en cuenta a la hora de darles premios o subvenciones a las empresas. Es necesario acreditar que están cumpliendo con la legislación laboral, y que el personal no está siendo explotado ni trabajando en condiciones precarias”, reclamó la diputada.
En este sentido, “hemos planteado una acreditación específica o un distintivo de calidad, para empresas cuya política de personal sea ejemplar”, mencionó.
Para Nereida Calero, “el personal es tan importante o más, en un servicio turístico, que el propio servicio. Y si está formado, tiene las herramientas de trabajo adecuadas, está contento en un ambiente sano y con unas condiciones
justas; todo ello se refleja en la calidad del servicio y en la satisfacción del cliente.
Cabe recordar que la legislatura pasada el Gobierno puso en marcha un Plan temporal contra la explotación laboral, pactado con la patronal. Se hizo una incorporación de 32 inspectores para luchar la explotación laboral y la competencia desleal, siempre en defensa de los trabajadores.
Si bien es cierto que se impulsó desde la Consejería de Empleo. “la consejería de Turismo debe propiciar, promover, impulsar o pedirle a sus socios de Gobierno, la actuación en los asuntos que, aunque no dependan directamente del departamento, repercuten directamente en el nuestro sector turístico”.